viernes, julio 29, 2011

LA TRISTE LUCHA DEL TRANVÍA

Como si de niños se tratara, PP/PAR se ponen a "jugar" contra PSOE, CHA e IU... y parece que el tranvía es la víctima. Argumentando unos y otros las diversas razones por las que se debe proceder o no al avance del tranvía, queda patente una cosa. Ni restos arqueológicos, ni vecinos, ni comerciantes, ni la movilidad, ni nada parece importar a nuestros políticos. Unos defienden a capa y espada el proyecto. Otros son completos detractores. Y es que esta ciudad es una ciudad de contrastes. Ni unos están dispuestos a ceder, ni los otros a aceptar los argumentos del otro.

Sea como fuere, los representantes de la DGA están preocupados ahora por unos restos arqueológicos enterrados y castigados a su olvido, cuando fueron ellos los que los enterraros, los "parece que" protegieron debido a la fragilidad de los mismos, pero no dudaron en hacer varios pases de apisonadora por encima de ellos, para alisar el asfalto que cubría la superficie donde están asentados. Para la sra Rudi, nada parece urgente. Ha llegado el verano... y desaparece... como si se merecieran unas vacaciones... ¿se las merecen? ¿Nos las podemos permitir? ¿No debería organizar esta región que según ella tan mal está?

La DGA ha exigido la ralentización de los trabajos en aquellos tramos que afecten a Bienes de Interés Cultural, y el control de los trabajos por parte de los arqueólogos municipales hasta que se reúna la Comisión de Patrimonio. Parece ser que el Ayuntamiento no ha solicitado los permisos preceptivos... Supongo que algún responsable habrá y se tomarán las medidas oportunas, pues una obra de esta emvergadura, no puede hacerse sin más, sin licencias y pasando de todo. La DGA está en su derecho de exigir dicha documentación, que espero se provea antes de las vacaciones. ¿O a nuestros diregentes les da lo mismo? ¿Tienen otras prioridades?

Tras mantener diversas reuniones a lo largo de este viernes, “y para evitar mayores afecciones a los ciudadanos”, recalcan en el comunicado, la consejera no ha hecho efectiva la paralización total de las obras, sino que ha exigido su ralentización en aquellos tramos que afecten a bienes de interés cultural, y el control de los trabajos por parte de los arqueólogos municipales hasta que se reuna la Comisión de Patrimonio.¿Cuándo?

En este sentido, ha mostrado su disposición a convocar una reunión extraordinaria (la ordinaria debería haberse celebrado en septiembre) en aras a minimizar las molestias a los ciudadanos.

Veremos qué hacen... de momento, el 1 de agosto está a la vuelta de la esquina y tanto unos como otros, tienen pinta que desaparecerán durante el mes... (¿Han generado vacaciones suficientes para irse ya?

Desgraciandamente, parece que unos pasarán olímpicamente de aquello que los otros argumenten... Incluso no sé si siquiera prepararán la documentación pertinente, mientras que los otros, que defienden los intereses de los comerciantes, van a tener ahora que defender delante de los mismos, un retraso a las obras. Y no olvidemos, que la zona en cuestión, ha supuesto, con el cierre al tráfico un gran problema y molestia a TODOS los ciudadanos, no solo a los que viven y trabajan en la zona, que ciertamente, lo tienen todos los días.

Veremos en qué queda este capítulo marcadamente político.

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