viernes, marzo 31, 2017

ZARAGOZA SIGUE APOSTANDO POR LA BICICLETA CUANDO SON POCOS LOS QUE LAS USAN

EPA publica que el envejecimiento de la población, la falta de una cultura en el uso de la bicicleta ligada a una red incompleta y falta de mantenimiento o el escaso número de aparcamientos disuasorios son solo algunos de los problemas que debe resolver el Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Zaragoza (PMUS) para cambiar los hábitos de los ciudadanos.

Ayer se celebró la comisión Ejecutiva del PMUS, integrada por representantes del Ayuntamiento de Zaragoza y el responsable del Consorcio de Transportes del Área de Zaragoza, presidida por el consejero José Luis Soro (CHA). En el encuentro, además de la presentación de los problemas y oportunidades a los que se enfrentan, se detallaron los objetivos generales de este proyecto que estará listo antes de que finalice el año, según confirmó la concejala de Movilidad, Teresa Artigas. Como novedad, incluye el propósito de mejorar la distribución urbana de mercancías o de reparto sostenible y crear una conexión entre las estaciones de Cercanías (Miraflores y El Portillo) con la de Delicias y el aeropuerto. También pretende crear una red de transporte urbano con el entorno periurbano de Zaragoza (barrios rurales) y con el área metropolitana.

La bicicleta se presenta como uno de los «temas fundamentales» del Gobierno de la ciudad, explicó Artigas. Sin embargo, el plan se afronta desde un punto de vista global. En este sentido, los efectos de la crisis y las desigualdades que ha originado, unido al envejecimiento poblacional y las diferencias que existen entre los barrios se presentan como el principal obstáculo a salvar. Aparte de el estrangulamiento que los carriles bici, infrautilizados, han generado al tráfico creciente.

La red de transporte público está incompleta respecto a la accesibilidad universal y, además, requiere de un estudio de reorganización de las líneas de bus que se complemente con el tranvía y que permita reducir la dependencia del uso del vehículo privado. Además del cambio de mentalidad, la escasa oferta de aparcamientos disuasorios frente al elevado número de plazas privadas en el centro generan un «efecto llamada» de la circulación por zonas que podrían destinarse a residentes. En cuanto a la movilidad en bici, es necesario dotar a la ciudad de una buena red ciclabe, actualmente inconexa e incompleta y con una mantenimiento inadecuado. Me gusta ver como la Sra Artigas ve en el número de plazas de aparcamiento en el centro como un efecto llamada. Si Artigas sigue restringiendo el tráfico, cerrando calles, coches y transporte público obligado a circunvalar el centro... El casco histórico perderá su vida, su comercio, su entidad... para fomentar el que aquellos que necesiten comprar, acudan a los centros comerciales del extrarradio.

El urbanismo es básico para el diseño del plan. Desde CHA, proponen implementar el sistema de supermanzanas como técnica para jerarquizar las vías urbanas y renovar la malla básica de la ciudad.

Lo único que pido es que ya basta de estudios sobre transporte urbano y más acción. La bici, nos la podrán meter por donde quieran... pero me gustaría conocer los argumentos que Artigas tiene para ampliar la red de carriles bicis y no llevar el tranvía a Delicias, por ejemplo, o porqué la red de autobuses no se ha mejorado desde su llegada al sillón confortable de la concejalía, porqué la línea 2 de tranvía no avanza,.... porqué sigue insistiendo en el fomento de la bicicleta cuando tiene desatendido el transporte público que sí que utiliza la población.

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